«Siguiendo las premisas del filósofo Jacques Derrida y el movimiento arquitectónico deconstructivista,
fragmento la ‘realidad’ con múltiples encuadres desde diferentes ángulos, rompiendo también la continuidad temporal,
poniendo en entredicho el paradigma del encuadre fotográfico. Distorsiono y descompongo los volúmenes dando presencia al vacío,
ese espacio en blanco que forma parte del todo, para crear nuevas realidades,
inaprensibles con una toma fotográfica única».